Cuando hablamos de tiempo hablamos del recurso más escaso, más preciado y que no encontramos en cajas en los súper mercados ni en ninguna parte para comprar y almacenar. Por eso quien aprende el valor del tiempo cambia sus hábitos de vida teniendo como principio respetar su tiempo y el de los demás.

Una de las primeras cosas que aprendemos cuando respetamos el tiempo, es que cuando hay un momento destinado para algo nuestra energía, concentración, atención y sentidos deben estar puestos en ello.

Hagamos una revisión de nuestros días y muchas veces cuando nos quedan cosas pendientes por hacer, se debe a que no empleamos ese tiempo con todos nuestros sentidos a lo que estaba destinado, entonces estamos haciendo 1 cosa pero pensando en 5 y no terminamos haciendo ninguna bien.

Agendas, calendarios, aplicaciones, son muchas las herramientas que nos ayudan hoy a organizar nuestro día, pero lo más importante y por lo que debemos empezar es por tomar conciencia del valor del tiempo porque no hay mejor sensación que sentir que hicimos lo que debíamos hacer, que lo hicimos bien y que no mal gastamos ese tesoro llamado tiempo ni para nosotros ni el de los demás.

Diana Vallejo Restrepo
Gerente Experiencia Cliente